Un Congreso y una elección de nuevo director de la ENAH

Un Congreso y una elección de nuevo director de la ENAH

Ya está el programa elaborado y antes de que se de la discusión pueden adelantarse algunas conclusiones de las intenciones en juego. De las mesas están excluidos los representantes de cada una de las licenciaturas y posgrados. El "Congreso" refleja, eso sí, las posturas que han venido debatiendo los distintos grupos. Será una repetición de las mesas de trabajo, pero tenemos algunas novedades más.

Programas de trabajo para la nueva Dirección

No han resistido presentar las plataformas políticas que saldrán con toda seguridad cuando se abra el proceso de elección. Lo más honesto es decir que se trata del inicio formal del proceso electoral. Tarde o temprano los colectivos de la AGENAH, cada vez más dibujados  sobre a quién apoyarán y al mismo tiempo desdibujados de lo que pudiese significar un respaldo desde una base que parece ya no existir para ellos, más que para reclamar el aval, cuando el paquete que ellos elaboraron sea votado en lo que preparan como un referéndum.

Algunas de las fuerzas ni siquiera han sido discretas. Programa para la ENAH, sólo falta decirnos quién será el candidato o la candidata. Son viejas fuerzas en el asalto de la dirección. Los nexos son visibles y pronto los militantes asamblearios de la AGENAH pasarán a ser representantes de opciones electorales.

La contraparte es menos identificable, pero allí está. En el Congreso no habrá consenso, habrán estrategias para acumular el mayor número de votos en la elección de la segunda mitad de 2019. Cada una de las fuerzas tiene un pasado y la suficiente historia porque ya gobernaron la ENAH.

Voto Universal en la elección de Director y arremetida contra las Academias de profesores. 

Para quienes estamos viejo en esto, no hay sorpresas, hemos observado más de una elección y conocemos a fondo los grupos que contienden. Esta elección será el Waterloo de los colectivos, un proceso de cooptación que culminará cuando estén allí a diestra o siniestra de las tendencias políticas que han controlado a la ENAH por décadas. Será divertido, se los prometo, ver como estos "anarquistas" radicales terminarán justificando su asimilación al poder, en el que se arriesgan a perderlo todo. Nuevos alumnos los reemplazarán como parte de la necesaria representación estudiantil, mientras que la promesa que les puedo hacer es que no se irán limpios, una vez que se empinen al poder.

La modificación del reglamento para elegir al Director por votación universal, nos regresaría a los años 70. Cambian las reglas del juego democrático, pero como en toda democracia, el poder no perderá nada, sólo cambiará su plan de negocio. Los poderes no cambian porque se elija de otra forma al Director. Como lo he establecido antes, no existe una diferencia radical entre los directores de asamblea y los elegidos por terna. Ambos no lograron resolver la ecuación con el INAH. Dependerán siempre del Instituto, aunque ha voces replanteándose la relación.

Sustitución y simulación

Han aparecido señales que nos dicen como la intención no es la hiperdemocracia que pregonan. Bloqueo a ponencias que se atreven a criticar el asambleísmo y pugnan por el consejismo. Coalición, colectivos feministas y ex zapatistas vuelven a la carga con los mismos temas de las mesas. Dignificación del trabajo docente, insistiendo en que le den plaza a todos los del SINTICULTURA sin examen de oposición, por antigüedad. Obligación de meter en la representación más representantes de eventuales en el Consejo y en las Academias. El viejo sueño de querer controlar la admisión por parte de la Coalición. En el reparto la defensoría de derechos estudiantiles cuya idea es convertirla, por parte de los núcleos feministas, en una fiscalía acusatoria que atienda todas las denuncias anónimas que se hacen; El sueño dorado de quién con cierta probabilidad se lanzará como candidata a la Dirección de la ENAH; El sueño de la gloria de aquellos que dicen cambiarán el Reglamento, aunque este se reduzca a la configuración de un nuevo Consejo Técnico en el que sobresaldrán los grupos en disputa, mientras el resto de la escuela parece ignorarlos.

Como los viejos sioux, desde el monte los observamos

Perfil Académico ha sido siempre una organización representa un polo crítico y una corriente de opinión. Nosotros veremos la orgía de lucha por el poder de quienes se dicen anarquistas, quienes dicen que quieren equidad de género y quienes dicen mandar obedeciendo. Los estamos observando y nosotros señalaremos en todo momento las inconsistencias. Vemos al verdadero conservadurismo, enlodarse por el poder.