sábado, 10 de noviembre de 2012

No disputamos nada, no es responsabilidad nuestra.

Hace unos años optamos por la política de observar.

Las jefaturas de carrera en la Licenciatura en Historia de la ENAH.

A partir del nuevo reglamento de la ENAH, en Historia se han sucedido jefes de carrera que antes recibían el  nombramiento de coordinadores. Arturo Alonzo fue el último Coordinador que recibió el nombramiento en cuanto tal y el primer profesor de HSM que en 1993 fue nombrado con el puesto de Coordinador. Orlando Arreola fue el último profesor de Tiempo completo, en tomar el puesto de Jefe de Carrera. Entre 1980 y 1997 todos los coordinadores y jefes de carrera fueron profesores de Tiempo Completo. A partir de 1997 y hasta nuestros días el nombramiento ha recaído mayoritariamente en profesores HSM.

Casi sin exepción, todos los Jefes de Carrera, se han relegido y sus periodos han sido de cuatro años: Martha Eugenia Delfin Guillaumin (1997-2000), Gumersindo Vera (2000-2004), Orlando Arreola Rosas (2005-2009) y finalmente Aarón Camacho (2009-2012). Así las jefaturas han sido en los hechos periodos de 4 años.

 Sólo al final del periodo de reelección de Orlando Arreola en 2008, emprendimos un cuestionamiento del Reglamento marcando la incongruencia entre el Reglamento de Licenciaturas que habla de elección de Jefe, lo cuál implica un proceso de votación y la reelección fast track que ejerce el mecanismo de la Academia, un problema no sólo de historia, sino del resto de las Licenciaturas. En esa ocasión se impuso por aparateo, la reelección fast track y nos mostró que era imposible hablar de una participación realmente democrática en la misma. Nos relevó de la responsabilidad de armar alguna opción y de evitar el desgaste de tratar de convencer a una comunidad que no desea alternancia, ni que cree en un espíritu no democrático que los que somos minorías y somos diferentes, representamos una especie de amenaza exterior. Ese mito siempre lo han jugado quienes han sido adversarios políticos en estas coyunturas y ya nosotros perdemos siempre porque el esfuerzo al parecer es inútil. Así que aunque digan que seremos una amenaza, esto no es real porque la sucesión no importa y porque sólo votaremos en nuestro derecho y nada más. Así que evitemos desgastes, movimiento de conflicto de intereses y ahora sólo se desgastarán quienes digan que tendremos candidatos o algo así.

En esta ocasión, sólo apoyaremos una opción frente a lo que se viene. Nadie en la Licenciatura es cándido para no conocer los intereses que se manejan en ella. Un servidor, sólo tendrá opiniones, pareceres y su voto individual, jamás opciones o disputa real, estoy muy cansado de todos estos juegos.

La evaluación sobre los resultados que tenemos. 

Los propios estudiantes y profesores deben hacer un balance de los años que les ha tocado y las cosas que han obtenido. Aarón Camacho culmina este año como Jefe de Carrera y ya se escuchan postulaciones en los pasillos. Decidirá el mismo grupo, nada es neutral, ellos han tenido esa decisión los últimos 12 años de historia de la carrera. Sinceramente es dificil que suceda una cosa distinta a lo que hemos visto en estos años y menos en la inexistencia de opciones independientes. La comunidad ha sido responsable de lo que sucede en la propia Licenciatura, en ello nos disculpan, los que hemos sido independientes cumplimos nuestros compromisos históricos y respetamos la voluntad aunque estas fueron a veces, francamente imposiciones. Tocará a las nuevas generaciones que hoy cursan la carrera determinar quién será su nuevo jefe de carrera en un proceso electoral que se repetirá y que recordamos.

En la elección de terna del Jefe de Carrera votarán la Academia de profesores de Tiempo completo, con un valor del 50 % de la votación y los representantes de los grupos académicos con el equivalente al otro 50 % de los votos. La terna calificada se envía a José Luis Vera, director de la ENAH y este definirá quién es el nuevo Jefe de Carrera. Ya en estos momentos se mueven las opciones de las únicas fuerzas. Mi papel creo que es votar por lo que en consciencia pueda ver y platicar sobre los programas que presenten los candidatos. Lo puedo hacer porque en realidad no pongo nada en el tablero del juego y esto me permite ser uno más de los que participarán en el proceso como electores. Desde la comodidad de esta posición tendre tiempo de comentar con ustedes mi opinión y mi punto de vista, que es uno más de los que existen en la licenciatura. 

Esta es la primera entrega de artículos que iré escribiendo a lo largo del proceso, de mi recolección en Radio Pasillo.

lunes, 16 de julio de 2012

Posicionamiento de Perfil Académico ante la Asamblea Interuniversitaria del Yo soy 132

Los abajo firmantes somos pertenecientes al Grupo Perfil Académico, espacio de participación de profesores y estudiantes que buscamos  encumbrar los principios de la democracia, la equidad, la tolerancia y la legalidad en el ámbito académico de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH). Durante varios años hemos impulsado en la medida de nuestras posibilidades los principios de democracia, tolerancia, equidad y legalidad al interior de nuestra escuela, buscando que estos hagan prevalecer un ambiente que trascienda la cultura propia del viejo régimen autoritario.

                Hoy en día, ante los hechos resultantes tras los comicios del 1º de julio, deseamos dirigir a ustedes las siguientes salutaciones y consideraciones:

 1.       Celebramos que el movimiento estudiantil que ustedes representan haya colocado con dignidad y entusiasmo el debate sobre la manipulación mediática de las televisoras para promover un candidato presidencial a modo de los intereses corporativos y oligárquicos de este país.
2.       Agradecemos la vigilancia que realizaron de la jornada electoral del pasado 1º de julio, demostrando a la nación entera que los comicios no fueron del todo limpios y legales.
3.       Felicitamos su capacidad de organizativa y de discurso en favor de la construcción del México democrático que todos necesitamos y merecemos.
4.       Saludamos en general, su valor para encarar la situación nacional y ser la voz más brillante que hoy puede ostentar la voluntad popular.
5.       Precisamente, a partir de su ejemplo, muchos han salido a las calles y con creatividad hacer manifiesta su indignación ante los sucios eventos del 1º de julio y por la ciega y hasta soberbia actitud de las autoridades electorales al no corregir, aunque fuera en una parte, lo que para todos fue evidente: el insulto al anhelo democrático del pueblo mexicano.
6.       Es por ello, así lo creemos, que el movimiento debe entender el compromiso que ha contraído con la sociedad, organizada o no, de este país. Numerosos mexicanos esperan una pauta discursiva y de acción, el momento es verdaderamente complicado y sus implicaciones son amplias. Desde nuestro punto de vista lo que está en juego es la plena suspensión de la transición democrática. La salida del PRI del Poder Ejecutivo Federal en el año 2000 tenía implícito el propósito de transitar de un régimen autoritario a uno democrático, el PAN en el gobierno y el resto de las fuerzas políticas dejaron de lado este cometido y las consecuencias las vemos al día de hoy en un sistema electoral y un régimen político que no otorgan certidumbre a la ciudadanía, al contrario, le dan corrupción, demagogia y violencia.
7.       No se trata de una persona sino de lo que encarna, esto va más allá de la figura que es Enrique Peña Nieto, que en sí misma es vacía, hablamos de un régimen autoritario que aún está vigente y que ahora será presidido por sus arquitectos originarios.
8.       Las posibilidades para la democratización de nuestra nación se ven comprometidas ante un PRI que no ha demostrado alguna vocación por la legalidad, la tolerancia y la equidad, a nuestros ojos es el mismo partido que sustentó el autoritarismo desde 1946.
9.       Ante este reto, creemos que el movimiento estudiantil, sin quebrar su vocación apartidista y fortaleciendo su voluntad de una nueva política, debe fijar claramente una postura por la democratización del país, en las circunstancias que impone un gobierno proveniente del PRI.
10.   Más aún, convocar clara y prontamente al resto de la sociedad organizada y asumir un solo frente por la democracia, las libertades ciudadanas, los derechos sociales, la soberanía y demás demandas que todas las expresiones traigan consigo, provenientes a su vez de una larga lucha.
11.   Por ello celebramos el acuerdo de su último Encuentro Nacional Estudiantil (ENE), para vincularse con el resto de la sociedad organizada, por lo que conminamos a esfuerzos para realizar los acercamientos lo más inmediatos posibles, con base en el respeto, el diálogo y la promoción de la democracia y la paz.

PERFIL ACADÉMICO. Escuela Nacional de Antropología e Historia

Alejandra Mosco Jaimes, Arturo Luis Alonzo Padilla, Jorge Ignacio García Ponce.

viernes, 1 de junio de 2012

En torno a la reelección de la jefatura de carrera de Etnohsitoria

Planteamiento del Problema.

En torno a la reelección de Jefe de Carrera de la Licenciatura en Etnohistoria se puede concluir que la reelección se da en un marco de legalidad conforme a los reglamentos que existen en la Escuela Nacional de Antropología e Historia y que el conflicto previo y posterior se deriva de una politización que no se basa en el cumplimiento de la normatividad vigente. Una comunidad democrática no se funda solamente en procedimientos de votación sino en el respeto de una normatividad vigente que da un marco de convivencia, respeto mutuo y certeza a una comunidad.


El problema de la Reelección de Jefes de Carrera.

Desde hace años la redacción del Artículo 30 del Reglamento General Académico de la ENAH (RGENAH) parece contraponerse con el procedimiento del Artículo 22 del Reglamento de las Licenciaturas de la ENAH (RLENAH) ya que el primero mandata un procedimiento de reelección, mientras que el segundo restringe el procedimiento a la decisión de las Academias de las Licenciaturas.

Parece contraponerse, porque mientras en la elección a Jefe de Carrera en un primer momento se configura con una Academia a la que asisten y pueden votar los representantes de los grupos académicos de los alumnos de la carrera; en el proceso de reelección, dichos alumnos no tienen ese derecho.

Esta situación ha dado lugar a más de un conflicto con el sector estudiantil y magisterial, pero es la norma y por lo tanto la reelección de los Jefes de Carrera es una atribución de las Academias en cada una de las Licenciaturas. Mientras no se reforme dicha norma y se funde en un principio de consulta amplia, lo legal es la decisión interna de la Academia, la que por principio de legalidad se debe respetar a pesar de que se pueda pensar en una Reforma a futuro.


La politización en Etnohistoria.

La inconformidad de un sector de la comunidad estudiantil de etnohistoria comenzó desde el inicio de la propia decisión de la Academia. Ya en alguna ocasión debatí con algunos miembros de dicha comunidad lo que expuse en el punto de el problema de la reelección de jefes de carrera e intenté canalizar de manera positiva sus esfuerzos a la reforma del artículo 22 considerando siempre que es una prerrogativa de los miembros de las Academias conformada por los profesores de Tiempo Completo y que por lo tanto habría que pensar como reformar el reglamento compensando ese derecho que se ha ejercido por cerca de 19 años.

Yo encontré en este encuentro con algunos consejeros técnicos y miembros de la comunidad opiniones críticas fundadas y también un sector que reflejaba un encono personal contra la jefa de carrera. Un encono que no puedo compartir porque de la misma manera en que hoy conozco a algunos de los actores del sector estudiantil, conozco a Lilia Isabel López desde que fue mi alumna en la carrera de Historia. De la misma forma en que no puedo descalificar personalmente a actores del movimiento estudiantil inconforme en etnohistoria y trato de entender sus demandas, me parece injusta y poco fundada la elaboración de calificativos personales, juicios categóricos en contra de Lilia. Yo soy una persona profundamente sensible y contraria al acoso laboral, no puedo admitir ni admitiré el linchamiento moral de persona alguna ni las denostaciones públicas que en mi perspectiva son injustas. No hablamos de personas que nos son desconocidas, sino de miembros de la comunidad académica que merecemos respeto y un trato humano. No es dañando personal y moralmente a las personas como puede proceder una comunidad universitaria, académica y democrática.

Tampoco puedo estar de acuerdo en violentar las normas y apostar a la presión política para cambiar algo que se debe cambiar en un proceso de Reforma. Parte de la politización y el escalamiento del conflicto consistió en violentar la soberanía que el reglamento le confiere a la Academia para su toma de decisión y luego las presiones políticas que se han hecho sobre el Director para que omita su decisión. Debemos partir del hecho, de que en este momento la Academia tiene la razón reglamentaria y su derecho, su decisión es soberana y que el Director de la ENAH sólo atiende lo que reglamentariamente esta fundado y motivado.

El Consejo Técnico no es un órgano que tenga atribuciones para corregir esta decisión hoy que le confiere el reglamento a la Academia, puede realizar una Reforma para que en el futuro la atribución de la Academia tenga un mecanismo más consensado. Hoy ni la Academia, ni el Director de la ENAH, ni Lilia López son responsables de un diseño reglamentario con estos problemas. Tampoco los estudiantes tienen hoy facultad de reelegir o impedir la reelección de un jefe de carrera mediante el procedimiento del artículo 22 del RLENAH. Para una comunidad democrática, respetuosa de las normas, lo que debemos hacer es canalizar nuestros esfuerzos en perfeccionar los reglamentos y las normas para dar cauce a la representación estudiantil. Lo que es inaceptable es que mediante la presión y la politización, se apueste a la ingobernabilidad de la ENAH, en momentos en que debemos estar muy unidos frente al contexto nacional y la movilización estudiantil que estamos presenciando, yo apostaría por dar la vuelta a la hoja y seguir adelante.