sábado, 12 de diciembre de 2015

EMERGENCIA EN LA ENAH. CONSECUENCIAS Y RIESGOS(2 de 3)

EMERGENCIA EN LA ENAH. CONSECUENCIAS Y RIESGOS(2 de 3)

Se los dijimos.

La cámara de diputados aprobó hace unos días la Reforma que crea la Secretaría de la Cultura. En la comisión todos votaron a favor, incluyendo a la representante de MORENA, Laura Esquivel. Las esperanzas de que nada pasaría o de que las discusiones se salvarían por lo menos en navidad se cayeron estrepitozamente. No esperaremos 45 días, el asunto ya es un hecho y es probable que la aprobación del senado sea exactamente igual. El boicot a la reunión de profesores de Tiempo Completo de la ENAH cumplió su cometido, nadie discutirá sobre lo que sucederá.

Ahora se repite la ineficaz forma de movilización de hace años, el plantón del Senado tampoco impedirá nada, mientras que la desbandada comienza a darse, se tramita a pasos acelerados muchas jubilaciones entre los investigadores y trabajadores del INAH, estar fuera es lo mejor antes de vivir el desastre y la caída. 

¿Qué vendrá?

El INAH perdió el control y la custodia del patrimonio arquológico nacional, el cuál ahora será resuelto por una autoridad superior, la Secretaría de la Cultura, que tiene una clará visión de explotación turística y que ve el patrimonio arqueológico sólo como un atractivo turístico.

Se meciona, sin poderlo confirmar, que algunos grupos se organizan a espaldas de los trabajadores para organizar el Sindicato Nacional de Cultura, se dice que los ex-maoístas que ahora tienen representantes hasta con las altas autoridades. De ser pueblo, ahora son funcionarios. Es seguro, que negocian, al mismo tiempo que aparentaron la movilización, mientras desmovilizaron sin mucho trabajo ante la desbandada.

Es seguro también que ante el escaso apoyo e inmovilidad y un reducido número, las dependencias que conformarán la Secretaría de Cultura serán mayoría frente a la gran división y desaliento que impera en las filas del INAH y del INBA entre los que negocian para hacer el nuevo sindicato y quienes se acogen aún a los viejos esquemas de movilización fracasados. Puede ser muy sencillo para la autoridad someter a presión y desdecirse de las promesas, para presentar su propia opción, un sindicato nacional charrificado y controlado que ponga en bandeja de plata los recortes, las supresiones a convenios anteriores y prestaciones para ponerlas al día. Los sindicatos persisten en la creencia de que detendrán las cosas en el senado, para la autoridad eso es perfecto, ante lo que vendrá en el futuro.

 El futuro de la ENAH

La ENAH se mueve en los rumores y la división. Que ya prometió la autoridad nombrar a Julieta Valle Esquivel, que ya le dijeron que sí, pero papelito, al menos hace unos días no habla. Que nos quedaremos en el INAH desmembrado del patrimonio y que esa suerte se dará en las escuelas, pero en la iniciativa, nada de eso aparece con claridad. La inmovilidad se produce por el pánico, pero por el conjunto de intereses también. Los inactivos no saben que hacer, los activos negocian y llevan agua para su molino. Los actores de la ENAH buscan rasguñar al menos una ventaja de toda esta situación.

Una parte confía en que la dirección del INAH nombrará a Julieta, total, es la que ganó y los intereses magisteriales de la licenciatura apostaron a ella. Un posgrado de licenciaturas aprobado, coexistirá con un posgrado del posgrado, los profesores de licenciatura no tienen que temer.

La presión y golpeteo sobre las academias por parte de la Coalición de profesores HSM se hace cada vez más evidente y se ha presentado en casi todas las licenciaturas, mientras que los profesores de Tiempo Completo se defienden en sus propias ínsulas. La campaña de acusaciones anti institucionales de la Coalición parecen ser muy evidentes, uno de sus miembros se descaró en un medio informativo de Puebla hablando de los "cacicazgos" de las academias mientras que su grupo promueve el privilegio de ser ellos quiénes controlan la contratación de profesores y para ello agitan entre los estudiantes sobre un supuesto mito de "mafias" en las academias, que no tiene otra finalidad que monopolizar ellos el privilegio de la contratación. Por ello la embestida central es ir precisamente contra la atribución de las academias de hacer prevalecer intereses académicos en la conformación de las plantas.

Una lucha que se asemeja a la de los anarquistas combatiendo contra los comunistas las calles de Madrid antes de que el fascismo finalmente se impusiera. En el panorama actual, puede que todo sea arrebatado, las prestaciones del personal de base al que aspiran los de la Coalición, los términos de contratación, las Condiciones Generales de Trabajo. No atinan a ver que si los Tiempos Completos a los que tanto acusan pierden ellos mismos sus bases, ellos no podrán aspirar jamás a una de ellas, ni por concurso.

En el balance veremos cuantos profesores investigadores dejaron el barco y no se jubilaron. Cuantos aprovecharon al tiempo para encaramarse en el nuevo sindicato. Muchos de ellos, no nos sorprenda aparecerán en la plantilla de los charros, ocupando las nuevas carteras del sindicato nacional. Es curioso que hoy se hable de comunidad y nadie promueva el diálogo racional. Se ve de todo, se tira línea, se manipula con falacias, se moviliza con odios personales ancestrales, se pretende aprovechar la debilidad de los demás y se quiere obtener ventaja. Vivimos en verdad tiempos muy malos donde la política refleja el estado de descomposición social.

Las acciones deslindan el terreno. 

Por desgracia cuando no hay claridad, es difícil discernir y el ruido nos impide una unidad de acción por la acción nociva del fraccionalismo. No podemos seguir en las falacias, ni en las facciones. Lo que viene nos demostrará quién es quién y que intereses persigue, ahora confiar en autoridades morales y ver con claridad quién tiene principios es difícil.

En dìas recientes un antropólogo social me encaraba por lo que digo aquí. Quién pierda que no soy sino un trabajador de la educación como los demás, con un rol dentro, no fuera de mi comunidad no entiende nada. Se ha construido un mundo de  falacias y mentiras donde se habla de despidos donde no los hay, se habla de profesores de asignatura donde no existen, se habla de violaciones a la ley donde no se explicitan o donde sólo se manejan de manera ambigua.

Reconocer que no hay despidos porque no hay profesores de asignatura contratados, es avanzar a ver la posibilidad de que lo sean, no por antigüedad sino por calidad académica, no golpeando y mintiendo sino construyendo un ambiente donde todos construyamos una institución llamada escuela.